Unir el alcohol a una depresión es un problema doble del que siempre se sale mal.
Son incompatibles.
Si las depresiones están siendo tratadas, los medicamentos se llevan fatal con el alcohol. Incluso con poco.
Entiendo que hay días en los que no se es capaz de levantar la moral y que el alcohol, ayuda a escapar y a ser un poco más animado, pero el precio es muy alto. Los medicamentos interactúan mal, dejan de funcionar o lo hacen el doble, depende del tipo de pastillas.
Recomiendo que se consulte con total libertad con el psiquiatra.
Si se tiene necesidad de tomar Orfidal o Tranquimazin y esto se consulta, con las mismas posibilidades se debe consultar qué hacer si se siente la necesidad de tomar alcohol. El médico entiende tu situación, y si no es capaz de entenderla, igual es bueno que te replantees buscar otro.
El alcohol está prohibido, pero también lo está ponerse enfermo, tomar más medicinas de las necesarias, estar triste con o sin motivo crónico o trabajar más de 8 horas al día.
Sobre todo, mucho control y respeto a la libertad de todos. Y a la tuya, claro.
Son incompatibles.
Si las depresiones están siendo tratadas, los medicamentos se llevan fatal con el alcohol. Incluso con poco.
Entiendo que hay días en los que no se es capaz de levantar la moral y que el alcohol, ayuda a escapar y a ser un poco más animado, pero el precio es muy alto. Los medicamentos interactúan mal, dejan de funcionar o lo hacen el doble, depende del tipo de pastillas.
Recomiendo que se consulte con total libertad con el psiquiatra.
Si se tiene necesidad de tomar Orfidal o Tranquimazin y esto se consulta, con las mismas posibilidades se debe consultar qué hacer si se siente la necesidad de tomar alcohol. El médico entiende tu situación, y si no es capaz de entenderla, igual es bueno que te replantees buscar otro.
El alcohol está prohibido, pero también lo está ponerse enfermo, tomar más medicinas de las necesarias, estar triste con o sin motivo crónico o trabajar más de 8 horas al día.
Sobre todo, mucho control y respeto a la libertad de todos. Y a la tuya, claro.