Chile fue escenario en 1960 del terremoto más fuerte registrado desde 1900 en la ciudad de Valdivia, un seísmo de 9,5 grados de intensidad que costó la vida de 1.655 personas.
Unos 25 años después, en marzo de 1985, un nuevo seísmo de 8 grados de magnitud en la escala de Richter asoló la región de Valparaíso, dejando 177 muertos y más de 140.000 viviendas destrozadas.
Un cuarto de siglo después de este último temblor, Chile vuelve hoy a vivir otra tragedia similar.