Desde este blog lo hemos comentado en varias ocasiones. Subir impuestos es de izquierdas y España tiene una carga fiscal e impositiva muy baja comparada con países de Europa a los que nos queremos parecer y ponerlos de ejemplo como eficacia pública.
"No estoy planteando una subida de impuestos, simplemente digo, como reflexión, que España, en relación con los servicios públicos que tiene, y en relación a las infraestructuras que tiene, y que debería seguir desarrollando, cuenta con una base impositiva muy baja en relación con la media de los países europeos", ha indicado José Blanco, ministro de Zapatero.
Una reflexión sincera y cierta. Todos tenemos que respondernos qué queremos hacer con nuestro futuro impositivo y dejar atrás esa demagogia que nos ha invadido durante años. Hay que elegir entre más impuestos o menos impuestos, con la responsabilidad que dicha respuesta tiene que tener en el funcionamiento del Estado.
Sin duda el siguiente paso es cambiar todo el sistema del control impositivo y del control en el gasto público. Mientras dispongamos de unas leyes y unas inspecciones tan banales en el control público, la sociedad no entenderá que subir impuestos es progresista.
Por el momento, el Gobierno ha confirmado a lo largo del último mes que su intención es subir impuestos en el marco de los próximos Presupuestos, aunque sólo para las rentas más altas. La incógnita abierta hasta ahora era si ello afectaría a más tramos del IRPF, si se rescataría el Impuesto sobre el Patrimonio o si se crearía una nueva figura impositiva.
"Si hay que pedir nuevos esfuerzos a los españoles lo haré los PGE (...). La idea del Gobierno es que esos esfuerzo van a ser para aquellos con alta capacidad económica", aseguró el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, durante el último Debate sobre el estado de la Nación, a mediados del mes de julio.