Falta autocrítica por parte de los socialistas españoles

Se escucha con insistencia que la decisión de IU de no apoyar al PSOE en Extremadura es un gran error para IU, pero no se hace un esfuerzo por entender a los militantes extremeños de IU que han tenido que sufrir, en sus pueblos sobre todo, los abusos de poder de unos gobiernos socialistas de todo tipo, que los han ninguneado, menospreciado y en muchos casos intentado absorber con malas artes.


Otro posible análisis es saber si esto será bueno o no en el futuro para IU a nivel estatal, que previsiblemente es malo, sobre todo si no saben gestionar bien lo que se les viene encima. Pero la respuesta de los militantes extremeños de IU es la lógica tras tener que aguantar muchos años el trato despectivo de los socialistas. Algo que por cierto no se ha dado solo en Extremadura, sino también por poner un ejemplo en Aragón hacia Chunta Aragonesista.


La inteligencia política de los socialistas ha brillado por su ausencia en estos años, cuando se han creído los únicos poseedores de la verdad progresista en España.


El declive del PSOE es evidente y la duda ahora es intuir si sabrá levantar el vuelo tras 2012 o si por el contrario la caída es más seria de lo que parece —aun— y van a surgir nuevas fuerzas en la izquierda que ocuparán parte de su espacio social.


Cuando Felipe González cayó del Gobierno en 1996 por un número de votos pequeño para lo que estaba cayendo contra los socialistas, no había por parte de la sociedad un anhelo de un gobierno popular capaz, y eso que no estaba Rajoy dando el cartel electoral. Y aunque se venia de huelgas generales no había en la calle una petición indignada por encontrar nuevas fórmulas de representación política en las instituciones españolas. Hoy esto es diferente a entonces, como lo es la debacle del poder socialista en todas las instituciones o la percepción de que estamos ante un cambio de sistema social global en muchos países occidentales.


No es pues un paso atrás de IU, no es una pinza pues no existen acuerdos programáticos ni de estrategia entre el PP e IU; no es más que un castigo hacia comportamientos poco inteligentes con los vecinos de ideología. Otra cosa es que sea inteligente o no lo que hace IU para dejar que gobierno en franca minoría el PP, que se frota las manos. Como otra cosa es esperar la autocrítica severa y seria de los socialistas españoles.