Tras ver esta tarde que cinco bancos españoles tiene estrés, lo lógico seria declarar el estrés prohibido de nuestro país, pues como lo empiecen a notar los ciudadanos que tienen sus ahorros guardados en entidades enfermas, lo podemos pasar jodidos.
Sin duda insistimos en la falta de comunicación pedagógica y tranquilizadora a la vez que informativa de primer nivel entre los que gestionen nuestro futuro y los que soportamos y pagamos nuestro presente. Es como una pelea en donde estamos expuestos a que nos den de hostias, pero en cambio nunca sabremos el por qué.
Tal vez lo más lógico sería no ver los Telediarios, o incluso escaparse a un pueblo del Pirineo y romper de un cacharrazo el teléfono móvil. Por cierto el Internet prohibido sin excusa, es peligrosísimo para estas dudas. Pero me han dicho que si te escondes es tanto como darles la razón y que los buitres chuparán la poca sangre que dejemos en la ciudad. ¡Jope!