No parece nuevo afirmar que el problema griego tiene difícil solución. Al menos desde el marco que Europa nos ha impuesto, en el cual moverse del Euro parece ser poco más que una muerte anunciada. Al menos añadimos, que sus deudas no sufran unos intereses de recargo tan abusivos que los convierten en imposibles de pagar.
A pesar de que soy muy proclive a las medidas de estímulo, es obvio que en Grecia han pasado ya lo mínimamente posible en ese aspecto.
Con unos intereses tan altos, cualquier inversión pública es de por si un lastre para el medio plazo, dado los intereses tan altos (incluso he llegado a leer que rozaban el 40%) que han tenido durante los últimos años.
Dejarles dinero a espuertas, bajo una política de austeridad, lo veo poco factible o útil. Lo estamos viendo. Si tiene que pedir prestado dinero a Europa pero luego tiene que recortárselo a los propios Griegos, el dinero no genera crecimiento. No da tiempo a hacer planes de crecimiento y la generación de confianza es ya un imposible.
Lo más inteligente habría sido no entrar en el Euro, menos con cuentas falseadas, lo segundo más inteligente habría sido salirse hace tiempo, pero como Europa no sabe venderse como lo que es, eso habría parecido la destrucción total de Euro (algo estúpido).
Ojala me equivoque, pero Grecia tendrá que acabar saliendo del Euro, devaluar su moneda, o declarar el impago, y empezar de cero. A nadie le gusta esa perspectiva, pero creo que es la más plausible. Solo estamos mareando la perdiz y, en el camino, alentando la especulación y los problemas financieros de media Europa.
Por otro lado, ¿os habéis dado cuenta de cómo se ha ido metiendo Francia poco a poco en la estela de los países PIGS? Ya he leído varias declaraciones donde la metían en el mismo saco. Será cosa de esperar a ver. Pero mala espera nos queda.