La alegría y el humor es el principal componente para demostrar ante la sociedad que somos positivos y felices. Da igual lo que nos corrompa por dentro. Si sabemos demostrar (demostrarnos) un cierto sentido de humor, pareceremos felices. Y lo que es más importante, lo seremos pues el humor es contagioso y es un compuesto que nos sirve para curarnos.
Tener sentido del humor ayuda a relativizar los problemas, a superarlos y a encontrar otros puntos de vista que ayudan y mucho a encontrar soluciones.
Hay que aprender a reírse de uno mismo, pero sin perder la autoestima ni el respeto que nos deben tener.
Hay que aprender a reírse de uno mismo, pero sin perder la autoestima ni el respeto que nos deben tener.
Hay que tener buen sentido de humor sin caer en chistes fáciles ni en gracietas que denigran a nadie, menos a uno mismo para que nos resulten positivas.
Nunca hay que herir a nadie sino conseguir tener sentido del humor desde el equilibrio y la mesura, para que nos sirve a todos casi como terapia.
Recordar que la risoterapia es una manera eficaz de mover los humores del cuerpo para que sean positivos, aunque sea artificial la forma de reírnos. Recordar que la risa es el medicamente más barato y con menos efectos perniciosos para la salud.