Ayer fue el primer día tras el anuncio de Mariano de recortarnos el mal pelo y que hoy firmará con la presencia del Rey para darle más bombo. Observo que hay muy mala leche entre los contertulios que son contrarios pero no saben defender bien sus posturas (o emplean la violencia verbal o se callan), escucho mala baba entre los de derecha defendiendo lo complicado y silencios o desganas entre los socialistas que están asustados por no decir faltos de todo lo que deberían tener.
Antes que Rajoy, deberían dimitir los socialistas viejos de su oposición floja y sin color, están ofreciendo una papeleta muy equivocada. España necesita soluciones y si la izquierda no ofrece NADA, será la de la derecha la única presentable, aunque sea muy malos sus planteamientos contra la parte social más débil.
Callarse en estos tiempos es admitir, es asentir y aprobar, es convertirse en nada. La gente de la calle odia lo que las bestias conservadoras han logrado convertir en odioso. Debemos ir preparándonos para lo peor o debemos trabajar mucho más por conservar lo que tenemos. No hay más alternativas.