Mira, amigo lector, seamos sinceros. Hay que disfrutar más de lo que tenemos. Intentar tener otras cosas distintas es mucho más complicado que intentar disfrutar de lo que ya tenemos.
Seamos realistas y sepamos disfrutar más de lo que SI tenemos, que es mucho y que no sabemos ver. Abramos más los ojos y busquemos la felicidad que nos rodea, que es cierto, se acompaña de muchos problemas, de algunas infelicidades, pero que muchas veces no sabemos separar el grano de la paja, lo bueno de lo malo.
Lo cotidiano es lo normal, lo que nos rodea, lo que tenemos como envoltorio. Es así, es lo que tenemos ahora, hoy. ¿Hemos sabido encontrar lo que es bueno en esto que nos envuelve?
Hay que disfrutar y gozar, buscar lo mejor, sin duda. Pero lo primero, lo más sencillo, lo que nos debe servir para empezar a disfrutar, es hacerlo, valorando más lo que nos rodea.Conocerlo más y sacarle su parte positiva.
Tenemos algo de tiempo libre, aprovechémoslo bien.
Busquemos ampliarlo.
Relacionemos mejor con nosotros la vida laboral, la vida familiar.
Aprovechemos mejor las relaciones con los demás, con los amigos o conocidos.
Seamos más optimistas. Todo es maravilloso o tremendamente doloroso. Depende de nosotros en muchas ocasiones.