No debería charrar de la huelga, para eso yo mismo estoy en huelga. Pero me pongo a pensar, me doy cuenta de mi realidad como desempleado y llego a la conclusión de que los parados no podemos hacer huelga, aunque seamos a los que más nos afecta esta crisis muy larga. No podemos pues estar en el paro nos impide hacer más paros.
Y digo larga crisis no tanto por los años que llevamos dentro de ella, como por los años que nos quedan de sufrir la crisis dentro de nuestras agallas, como si fuéramos hormiguitas y un camino fijo hacia la madriguera llevando migajas.
Hoy he visto dos vídeos. Uno de Niño Becerra de casi una hora y otro de unos viejecitos sorianos. El primero del año 2010 y el otro del año 2007. Ahora vemos vídeos viejos para saber qué opinaban los sabios de nuestro presente, cuando era futuro.
Joder con todos. Es que aciertan. Claro que yo también escribía en aquellos años que esto se nos acababa, que estábamos en una espiral imposible, Pero yo es que ya nací pesimista y por eso no me hacía mucho caso. Si esta vez he acertado no es por mi capacidad para intuir, sino por la capacidad de la sociedad para persistir en sus equivocaciones. Era fácil, muy fácil.
Niño Becerra dice lo que les va a pasar a los parados mayores de 50 años. Yo ya lo sabía pero me tranquiliza saber que otros también lo saben. Al menos puedo decir a la familia que no puedo hacer nada nuevo, que no es posible hacer más por lograrlo. Jodo, vuelvo a decir, menos mal que el martes y 13 fue ayer.