Como todos dependemos de todo, a veces cuando nos quedamos sin trabajo perdemos el enganche con la vida.
El empleo es fundamental para sentirnos seguros pero sobre todo para seguir conectados con la sociedad, pues es imprescindible sentirnos útiles para seguir viviendo.
Si nos quedamos desenganchados de nuestra vida anterior, con urgencia hay que buscar otro nuevo empleo, remunerado o no, para seguir sintiéndonos útiles consigo mismos.
Efectivamente necesitamos ingresos, pero mientras estos no llegan al menos hay que estar activo y en cadena con la sociedad.
El empleo es fundamental para sentirnos seguros pero sobre todo para seguir conectados con la sociedad, pues es imprescindible sentirnos útiles para seguir viviendo.
Si nos quedamos desenganchados de nuestra vida anterior, con urgencia hay que buscar otro nuevo empleo, remunerado o no, para seguir sintiéndonos útiles consigo mismos.
Efectivamente necesitamos ingresos, pero mientras estos no llegan al menos hay que estar activo y en cadena con la sociedad.