Surgen con fuerza las chicas “betches” a conquistar sus
vidas. Bien, están en libertad como antes lo estuvieron los yupis que hoy son
ya historia y mal recuerdo.
¿Qué son las betches?
Pues una transformación de “bitch”, de “perras” en el bien
sentido de la palabra. En España se llaman también “betch” pero durante muchos
años se las ha llamado de forma amistosa y no como insulto: perras, cachondas,
pijas incluso, según zonas y sin ser nunca un insulto.
Una “betch" es una chica con posibles, joven que no supera
los 25 años, universitaria y pasta suficiente para sus gustos, que no es fácil
aunque le gusta el sexo elegido, y que se cuida mucho para estar guapa y sobre
todo no estar gorda.
Vamos, efectivamente, una pija 2.0, una pija adaptada a la
modernidad del siglo XXI.
Suelen ser chicas de derechas, gritonas, soeces en su forma
de expresarse para dejar claro que ellas mandan, provocadoras, copias de una
París Hilton o Lady Gaga cualquiera.
No quieren trabajar pues es una horterada, no quieren pagar
pues para eso están los hombres, se hacen de rogar y elijen, no gustan del
Metro y prefieren que las hagan gozar a que sean ellas las que pongan de su
parte para que el hombre goce. De hecho sin hombre se puede vivir igual o
mejor, pues las mujeres tambi
én son atractivas para ellas.
Adoran la modernidad, Barcelona o Londres, Turín o NY, pero desde la inocencias
mostrada que esconde una dureza clara.