Da igual el color de la bandera, siempre dentro de la tela, de sus símbolos o historia se acoge una sociedad. Cuando se quema una bandera se intenta atentar contra la sociedad a la que representa. Ya lo sabemos todos.
Es más bien la cara de odio de quien quema una bandera, muchas veces sin conocer mucho más que unos colores y unos gráficos sobre una tela. Quien quema banderas no suela viajar a conocer, no es un letrado en materias históricas o sociológicas. Suelen ser personas que necesitan desahogarse. Que amparados en el grupo, gozan del fuego como mal menor de ocio sin que sepan explicarlo.
Lo de menos son las razones, que las puede haber, lo que importa es que mientras queman banderas no hacen otros actos vandálicos peores.