Todos queremos pertenecer al grupo de los que "podemos" aunque a veces sea a costa de caer en tontadas consumistas que no procuran placer sino "parecer ser como los otros".
Los publicistas saben bien crear y jugar con la comparación. Tanto entre productos como entre personas que deben elegir. Las marcas existen por eso. No solo creemos que hay que elegir sino además decirlo para que se note.
Elegimos marcas o productos, usos o servicios. Y debemos hacerlo notar. Muchas veces el placer es simplemente eso, que se sepa por los demás que nosotros SI PODEMOS. Ya hemos obedecido a los publicistas pero eso si, sin admitirlo que eso no mola nada.