Darle el Premio Nobel a Obama antes de merecérselo de verdad parecía una temeridad. Ahora parece una estupidez. Nos dice el del “Sí, podemos”que en Europa debemos reforzarnos militarmente frente a la amenaza rusa, que nos debemos plantear colectivamente que tras la vista de los de Rusia somos una mierda y no pintamos nada de nada. Que tampoco era cuestión de que nos lo recordara.
Enseguida la OTAN ha dicho que tranquilo amigo, que en breve van a realizar más ejercicios militares que es la forma más sencilla y barata de entrenarse a jugar a las guerras que conocen lo militares.
Pero lo que ha dicho Obama es algo más que lo que se lee en su comunicado. Lo que nos quiere decir es: —Ojo, que Putin, de nombre Vladimir, está con “ganicas” de invadir Ucrania, y que eso bueno, se lo dejaremos, pero que como ponga un paso con bota más allá de Ucrania, le tendremos que joder los morros a base de bien.
Es decir, que lo que decía Obama era: —Ojo Vladimir con tocar a Polonia, Rumania, Lituania, Letonia o Estonia, que la joderemos bien jodida. Visto el dinero que hemos ido recortando en gastos de defensa con la crisis, si tenemos que destinar en España alguna “perrica” más a tanques o a soldados, los recortes en sanidad o educación van a ser de miedo. Eso o tener que pagar más impuestos los pobres de espíritu, que somos los únicos que pagamos.