La mini reforma fiscal del gobierno del PP 2014 es un intento de parecer y no ser, de querer contentar a los españoles tomando el pulso y el impulso de un momento que ellos consideran bueno para dar un salto de popularidad. Humo simplemente.
Bajarán los impuestos de las grandes fortunas, bajarán también de las personas que menos ganas pero subirán los de las clases medias, lo que colocará más o menos en neutro la rebaja que dicen ser por la subida que ellos mismos hicieron cuando llegaron al gobierno.
Para que nos hagamos una idea más clara, la reforma fiscal del Gobierno ahorrará en el año 2015 unos 12 euros al mes a las rentas de hasta 12.000 euros anuales, unos 22 euros para quien declare sobre los 20.000 euros brutos anuales, mientras que logrará unos ahorros de unos 270 euros a quienes coticen por encima de los 150.000 euros.
No lucha mejor contra el fraude y no hace caso tampoco ni a los expertos que hicieron unos documentos de análisis con muchas recomendaciones que ahora no se tienen en cuenta, ni parece agradar a Europa que no admite que haya menos ingresos. No parece compatible una rebaja no progresiva con no tener los mismos ingresos. Luego de algún lugar deberán aumentar o es mentira que bajan.