Ya estamos a punto de poder tomar CocaCola o Pepsi en casa
directamente recién hechas por nosotros mismos, con el punto de gas que
quieras, con los añadidos que te vengan en gana. Las propias marcas comerciales
junto a otras empresas de soda y tónica están a punto de sacar unas máquinas
tipo a las de café con cápsulas, para meter gas carbónico en el agua y añadirle
una cápsula de sabor. Las posibilidades son muchas y los sabores se abren a más
posibilidades. No ya solo con o son cafeína o azúcar, cafeína ligeros toques
diferentes según en las fábricas mezclen los polvos mucho más personalizados
que en las latas. Falta apurar más el sabor, lograr que no se note excesivamente
que los polvos los pones tú al por menor y no la fábrica en grandes toneles. Y
lanzar al mercado lo nuevo en el que seguro casi regalarán la máquina como
sucede con las de café de cápsulas pues el negocio está en vender los polvos.
El almacenaje sin duda es más economíco de espacio, sobre todo en la nevera
donde solo hay que tener agua fresca.