Se empeña el nuevo Pedro Sánchez en publicar las cuentas de su partido y sus dirigentes, como si pensara que los españoles somos tan tontos que nos conformamos con ver papeles impresos de personas que se dedican a la política. Ya sabemos que la inmensa mayoría de los políticos son honrados, como también sabemos que los pactos de los que nos quejamos son los que favorecen a los que se llevan el dinero, que no siempre dan la cara ni son conocidos.
El PSOE no debe perder el tiempo en publicar las cuentas de sus personas conocidas, sino dedicarse más a investigar todos esos asuntos de tapadillo que han emponzoñado la política española con el silencio cómplice de excesivos socialistas.
Hay que limpiar sindicatos, consejos de administración de empresas públicas y de empresas privadas que han jugado a ser amigas del poder. En pocas palabras, hay que destrozar a esa casta que nos ha tomado por tontos. Y esto lo dice muy bien Podemos y por eso suben.
Sea el PSOE o IU, la izquierda vieja debe saber que ya es vieja solo por ser. Y que hay que reflexionar mucho para avanzar, si la sociedad nos deja. Las personas no quieren conocer las declaraciones de renta -bueno, algunas si- de sus políticos, sino las soluciones para los problemas sin que estas sean nuevos problemas. Los ciudadanos quieren saber a quien ocultaban cuando no destapaban el asunto Pujol o lo que parece lo mismo, quien además de Pujol está dentro de estas marañas que nadie quería destapar. Ver lo que ganas un concejal es el chocolate del loro.