Aprende, estudia, aprende, estudia. Y no te preocupes por los exámenes. En la vida te estarán examinando siempre y al final te acostumbras.
En la vida unos pocos te amarán y unos muchos te tendrán envidia. Lo importante no es evitar esto, pues es imposible. Lo importante es saber diferenciarlos.
Los consejos de los padres puede que no sean los mejor preparados, pero sin duda son los más beneficiosos pues nunca tienen doble intención. Ellos solo desean lo mejor para ti.
No intentes que la vida sea justa, no te rebeles desde el cabreo contra las injusticias. Trabaja por convertir la vida en más justa. Verás muchas injusticias, algunas te afectarán. Pero hay que trabajar por evitarlas, no ponerte a llorar por ellas.
Sigue aprendiendo mientras sigas creciendo, es decir, siempre. Aprende de todo, pues todos te pueden enseñar algo.
La felicidad no se busca, se obtiene. Tú debes entregártela, eres tú quien la gestiona. Pon buena cara aunque tengas mal cuerpo. Pon alegría aunque sea duro. Es mejor eso que lo contrario.
El dinero solo sirve para gastarlo. Y para ganarlo. Nunca se debe gastar lo que antes no se ha ganado. Para saber lo que vale el dinero, antes debes saber lo que vale (cuesta) ganarlo.
No actúes, no sirve de nada. A los actores se les critican por mentir, si antes no han avisado de que son actores. Si quieres mentir a los otros, avísales de que eres un actor. Al menos no te insultarán y puede que te aplaudan.
La vida te dará golpes, como a todos. Solo si eres fuerte para aguantarlos, serás fuerte para aprender de ellos.
Si un problema no tiene solución, si de verdad no tiene solución, no te preocupes por él, en realidad no es necesario pues no tiene solución.