Curiosamente Bankia al publicar los datos
de esas tarjetas “negras” de un montón de jetas sonrientes, no ha querido publicar los
datos de los gastos del mes de febrero de varios años.
Y nos hemos dado cuenta, señores; en
febrero es San Valentín y las tarjetas negras se utilizaban para ennegrecer las
relaciones sexuales. Nada como presuntamente regalar cabronadas a las amantes en San Valentín
con una tarjeta negra que no deja pistas. Maravillosos regalos carísimos que pagamos entre todos al rescatar el banco.
¿Cuántas mujeres hay en esta utilización brutal de
tarjetas negras? Es curioso ¿no? No hay mujeres en este chanchullo.Damos como país pena y deberíamos tomar medidas más duras, pues somos el cachondeo de media Europa. La otra media ha decidido (también) suprimir las tarjetas negras.