Tener trabajo es muy fácil. Lo complicado es lograr que te paguen un dinero por realizarlo. Tener trabajo es imprescindible para todas las personas. Es una necesidad vital. Pero para ello no es necesario que sea retribuido.
Todos tenemos la necesidad de poseer un oficio al menos, ocupación laboral constante en el trascurso de la vida, pues si no es inevitable hundirse como personas. La sociedad necesita que todos nosotros tengamos un trabajo, aunque no necesita que todos tengamos que cobrar por el mismo. Cobrar es para consumir. Tener trabajo es para mejorar la sociedad y para mejorarnos nosotros mismos.
En ningún lugar está escrito que el trabajo nos lo tienen que proporcionar otras personas. Hay que asumir esto para buscar y encontrar la libertad personal. Otro asunto del que hablaremos después, es disponer de la forma para tener ingresos económicos suficientes para vivir.
Es muy importante separar lo que es trabajo de lo que son ingresos necesarios, aunque casi siempre vayan asociados, unidos por la necesidad de disponer de ingresos propios.
Nos han enseñado a tener que depender del trabajo que nos ofrecen para así poder tener un ingreso suficiente. Esta enseñanza es simplemente una dependencia, una manipulación para así podernos pagar lo que quien organiza el trabajo estima suficiente y disponer de nuestro trabajo según su necesidad. Somos simplemente vendedores de parte de nuestra vida, para poder seguir estando vivos.
Pero el trabajo es mucho más que eso, es algo que no siempre debemos vender; sino también regalar, compartir, tener la sensación de que somos los dueños reales del mismo.
Todo el trabajo necesita una formación detrás que sea suficiente para poderlos realizar con eficacia pero también con gozo. Hacer un trabajo que no nos guste es terrible y cada vez más es lo habitual. Pues no somos dueños del trabajo y por ello tampoco de nuestro tiempo, es decir de nuestra vida.
Hay sociedades donde se enseña a los jóvenes, bien desde la Universidad o desde los Ciclos Profesionales, a ser independientes de quien compra y vende trabajo. Se enseña a crear nuestro propio trabajo, a depender con muchas ganas de él, a mejorar en el mismo por nuestro propio egoísmo del disfrute o del beneficio económico. Depende de personas, pero siempre desde nuestra libertad.
Siempre dependemos de algo o alguien, pero si además dependemos de que otra persona o empresa nos tenga que llamar para trabajar y así poder pagar nuestras deudas o nuestro pan, estamos pillados en una falta de libertad total. Y ahora vuelvo sobre las primeras líneas. Tener trabajo es muy fácil y muy necesario.