Este dispensador de medicación para enfermos crónicos y que toman al menos cino o seis diferentes tomas de medicaciones al día, algo bastante más habitual de lo que nos pensamos, es un nuevo invento muy útil para personas mayores y sobre todo para residencias de ancianos donde hay que llevar un control muy riguroso entre numerosas personas y pacientes con muy diversos tratamientos.
El médico te hace recetas para 15 días y en la farmacia te crear estos cajones donde además de dispensar la medicación te recuerda con un rollo de papel impreso, el horario de cada toma y las medicinas que debes tomar en ese momento. De esta manera es muy más complejo olvidarte de una toma, o confundirse del tipo de medicación.
En estos momentos este tipo de dispensador solo se da para la medicina privada, pero es un gran invento que sin duda poco a poco se irá imponiendo en toda la medicina.