El Rey Carlos II de Inglaterra, de Escocia, de Francia y de Irlanda era conocido como “el Alegre” muy posiblemente por su afición a tener hijos bastardos, reconocidos o no. De los primeros llegó a reconocer como legítimos a un total de 14, lo que sin duda confirma que el mote le venía muy bien adjudicado. Nunca pudo tener un hijo con su esposa por sucesivos abortos y fue un impulsor de las Artes en su periodo de reinado. En este cuadro lo podemos ver perfectamente disfrazado de Rey Poderoso y con cara de pocos amigos y menos amabilidad. Pero sus partes importantes las lleva tapadas. Eso si, en una mano el mundo y en la otra la vara por si te agachas.