En medio de los estuarios del Támesis la extraña belleza de unos edificios llama la atención. Son los fuertes Mar Maunsell construidos en el año 1942 eran operados por la Royal Navy inglesa en la II Guerra Mundial y tenían como misión detener y avisar de cualquier intento alemán de colocar minas en el mar o en la desembocadura de los grandes ríos ingleses, mediante aviones alemanes. Llevan su nombre en honor al ingeniero militar que los diseño.
El diseño era una construcción de hormigón sobre una barcaza pontón que flotaba y que contenía con dos torres cilíndricas en cuya parte superior se instalaron dos cañones de 3,75 pulgadas y dos cañones antiaéreos Bofors de 40 mm.
Además de su labor de obstaculizar las incursiones aéreas alemanas, los fuertes también ampliaron la cobertura de los radares en la zona del Támesis, e incluso como sistema de primera defensa en caso hipotético de invasión alemana.