Año Nuevo, proyectos de vida nuevos. ¿Pero somos capaces de medir los riesgos, de saber prepararnos para emprender un nuevo proyecto, un nuevo negocio?
Vamos a necesitar un capital inicial que si no lo tenemos deberemos acudir a un banco a solicitar, con sus correspondientes gastos y presentando los avales que nos soliciten. Si ya estamos en el desempleo no podremos capitalizar el pago, no así si todavía no hemos acudido a la oficina del INEM. Aunque estas normas van cambiando según tiempos.
Si queremos realizar un proyecto nuevo, la primera decisión será: ¿Sólos o acompañados? Dos es mucho más que el doble de uno. Para crear, para la seguridad, para tener una visión completa del negocio, de la idea, para complementarse. Pero también para los errores, las disputas, los problemas. Si te unes a personas, analiza muy bien todos sus aspectos personales, pues tendrás que estar muchas horas gestionando alegrías y problemas.
Recuerda que toda empresa se sujeta en al menos tres patas. Producción, venta y gestión. Pero a su vez estas se sustentan en otras tres patas aledañas. Colaboradores, clientes y proveedores. Un gestor, un asesor es también un proveedor.
Tan importante es fabricar como vender. Tan importante es acceder a los mercados como conocer bien a tu competencia. Tan importante es fabricar algo de calidad como mantenerlo siempre en el tiempo. Tan importante es ser amable como serlo cuando los problemas vengan en forma de lo que sea. Tan importante es el trabajo del delantero centro que mete goles, como del portero que evita los del contrario, como del centrocampista que reparte juego o el masajeador que pone a las personas “a punto”.