El grave problema del paro y desempleo en España nos parece irresoluble, aumentado en los últimos años por el empleo precario y sin calidad social ni económica. Tenemos la sensación de que en muchos años no lograremos crear empleos nuevos netos, que sean capaces de dar trabajo a millones de españoles, y sobre todo que sirvan para crear riqueza en nuestra sociedad, para que los españoles sí sientan dignificados por su trabajo y por lo que obtienen por el mismo. ¿Tan complicado es crear nuevos empleos? Veamos alguna claves para intentar entender esto.
Los empleos sólo los pueden crear empresas, sean estas privadas o públicas.
Realmente los empleos los crean otras personas con sus decisione, que son quienes toman decisiones a través de empresas.
Todas las empresas privadas tienen como meta obtener más beneficios. Hasta hace unos años se pensaba que crecer era el mejor camino; ahora se piensa que bajar los gastos es el mejor camino.
Todas (casi) las empresas que hoy existen están endeudadas y necesitan recapitalizar sus contabilidades.
Casi todas las empresas necesitan con urgencia volver a invertir en nuevas tecnologías de producción, pues durante estos años no lo hen hecho, y todo el proceso se ha ido quedando viejo y obsoleto.
Las empresas no van a crecer para facturar más, mientras no vean una economía pública limpia y clara, y una facilidad de crédito.
Las empresas antes de crecer para facturar más, reestructurarán sus gastos, sus plantillas (más), su tipo de producción, su tipo de cliente, su gestión.
Cuando salgamos de la actual situación de crisis del sistema y las empresas empiecen a tener algún beneficio, lo emplearán en pagar deudas en primer lugar. Tras ello, volverán a invertir en nuevos procesos de producción y tras ello, empezarán a contratar a más gente para crecer en tamaño.
La forma de entender las relaciones laborales YA han cambiado. Los viejos empresarios quieren una manera diferente de contratar, de pagar, de despedir, de emplear los RRHH. Los nuevos empresarios están necesitando inventar nuevas formas de relacionarse con los equipos de personas.
La única manera para los trabajadores de salir de este círculo asfixiante de poco y mal trabajo es EMPRENDER y crear sus propios trabajos. Pero con más formación y sobre todo con sumo cuidado en las inversiones, aupándose desde equipos y no desde una forma individual. Emprender nuevos proyectos es complicado, pero el éxito gratifica.
Lo más complejo no es conseguir la financiación para un proyecto nuestro, esto muchas veces es falso. Lo más complicado es encontrar un proyecto válido, rentable, que tú mismo te lo creas de verdad. Si quieres ser empresario de tu propio puesto de trabajo, debes buscar una buena idea que sea rentable. Si es rentable encontrarás quien te preste dinero para obtener esa rentabilidad. Pero antes tienes que demostrarles que tu idea es rentable.
Convertirte en empresario, aunque sea sin trabajadores, es un riesgo. Efectivamente. ¿Y? ¿No es un riesgo estar desempleado tras haber realizado una formación alta durante muchos años? ¿No es un riesgo irte a China, Alemania o Chile a trabajar por cuenta ajena?
Piensa SIEMPRE en los beneficios de tu empresa, pero no pienses NUNCA en repartirlos como si fueran el premio a tu trabajo bien hecho. Los beneficios son para reinvertir y pagar deudas, para capitalizar y estar más seguro, para ser mejor que tu competencia o para aprender, para crecer despacio o para diversificar tus proyectos. Los beneficios son para perderlos o bien para multiplicarlos.
Todas estas pequeñas claves se resumen en una sola. Debemos emprender, estudiar la manera de crear nuestro propio puesto de trabajo, nuestra propia empresa por pequeña que sea. Saber qué podemos hacer, en qué somos buenos, hasta dónde podemos invertir, con quien podemos contar para intentarlo. La formación empresarial es una buena manera de tener formación profesional.