Esta imagen es vieja y ha circulado por las redes con amplitud, pero es muy correcta para recordarnos el gran valor que tiene para las empresas la formación interna, el crecimiento formativo de calidad y constantemente actualizado de todas las personas que forman parte del equipo de un gran empresa, aunque sea pequeña de tamaño. No creer en la formación constante es un gran error que muchas empresas españolas ya han pagado al ser adelantadas por otras o al ver a su gente irse a otras empresas, no por más dinero sino por más futuro profesional y más seguridad laboral. La formación da seguridad a la empresa y a los que se emplean dentro de ella.