No es fácil recapacitar para adivinar el motivo de la celebración de un Día Zombie. Pero lo hay. Y en ese día que no en todos los países es en la misma fecha, quien quiere puede salir a la calle disfrazado de muerto, que no está mal para dar espectáculo.
En los últimos años y con la moda de películas y thriller muy visuales, ya no queda bien salir solo de muerto, sino que además hay que desfilar lleno de sangre, de rotos, de destrozos humanos, de carnes desgarradas, de roturas impensable. No es que estés muerto, es que simplemente no es posible que sigas vivo.
El trabajo de algunos “retoques” es tremendo, con tal de asustar. Claro que…, y si se trata de asustar, no sería mejor salir a la calle así, en cualquier día, y no en e¡uno en que ya te lo esperas?
¿Alguien se imagina coger el ascensor y que te salga una señorita así y te pida un beso de morros? Nunca quedaría mejor la frase famosa: No es No.