Cada día todas las empresas, todas las organizaciones son más horizontales que hace unos años y por ello hay menos posibilidades de un crecimiento vertical, una organización piramidal. Eso no quiere decir que no exista posibilidad de crecer dentro de la empresa, aunque no se asciende de la misma forma que antaño, pues el organigrama tiene que ser distinto.
Para ello es fundamental cuidar nuestro crecimiento formativo personal y decidido buscando nuevas habilidades, conocimientos, o al menos en una actualización constante de los que ya tenemos. Las organizaciones horizontales también se mueven y también ofrecen oportunidades y hay que estar preparado para ello.
Aunque sea hoy mas complejo el ascenso vertical dentro de la horizontalidad de los procesos de gestión, no todos los miembros de un sistema horizontal están en la misma posición del equipo. Y además no es cierto que existan sistemas horizontales puros, simplemente se han simplificado el número de escalones.
El crecimiento puede ser hacia una mayor responsabilidad en el trabajo, al que muchos nos dirán que estamos confundiendo el crecimiento con un cierto esclavismo, pues todo crecimiento nos exigirá una dedicación mayor. Sin duda estas personas que no creen en la horizontalidad y sus beneficios deben ser los primeros apartados del proyecto.
Tener más responsabilidad supondrá tener más seguridad, pero sobre todo más comodidad laboral para utilizar y aumentar la flexibilidad que debes poder lograr con tu esfuerzo y tu valía productiva.
Si tienes más competencias y no eres ascendido, sin duda la organización necesitará tenerte motivado y activamente positivo, y eso en tiempos de crisis solo se logra con más libertad no controlada. O con mejores sueldos.
Y sin duda también con mayores posibilidades para seguir formándote, lo que garantiza más seguridad dentro de la organización o fuera de ella si en un momento dado hay que optar por exigir o salir de la misma.