Hablar con alguien de tu completa confianza es la mejor terapia, pero si no se puede, al menos escribe o dibuja, que también ayuda y mucho.
Necesitamos vaciar nuestra papelera interior de vez en cuando. A veces funciona hablar con nosotros mismos, utilizar nuestra capacidad para el diálogo interior, pero no siempre funciona tal y como necesitamos.
En algunas culturas utilizan al psicólogo, en otras al cura, en la nuestra posiblemente nos queda una mezcla de todas ellas junto a las amistades de verdad, a la pareja, y si todo está complicado, sin duda debes consultar con un psicólogo. No hay que tener miedo en reparar el motor y para ello hay que acudir a un mecánico de humanos.