Dicen que quien da primero, da dos veces. Y Patxi López lo ha tenido en cuenta para decidir que el PSOE necesita un líder como él y no un juego de nada de nada. Amagar es un verbo absurdo en política. Más en tiempos de crisis existencialista como el actual. O eres, o no existes. Ahora susana Díaz deberá decidir. Andalucía contra el País Vasco, que es tanto como decir Andalucía contra el resto de España. Cuidado con esta forma de ver las cosas, pues de ellas saldrá el futuro.
Sin ser dos concepciones positivas del socialismo que se necesita para reverdecer el siglo XXI, si son muy diferentes, como para que el PSOE resultante de una o de otra opción, sea totalmente distinto en posibilidades y planteamientos. ¿Podría haber otro tapado que no tenga ninguna posibilidad sobre el papel pero que sirva para restar apoyos a alguno de los dos? ¿Y Pedro Sánchez qué?
España necesita un PSOE capaz, o mejor dicho: España necesita una izquierda capaz. Y de momento y para desayunarnos este 2017, las opciones que vemos nos dan escalofríos de los que te dejan en casa. Tanto Podemos como el PSOE necesitan aclararse y aclararnos. Ellos verán, pues mientras esto no suceda los españoles progresistas seguirán escondidos al abrigo de sus mantas. En sus casas.
Es tanto el trabajo que hay que hacer en el PSOE, que un Patxi López sólo no podrá con todo. Necesita un gran equipo válido. Y en eso está la gran diferencia entre el éxito o el fracaso. Si en estas pocas semanas (o casi mejor, días) es capaz de articular y mostrarnos un equipo respetable, los medios de comunicación, sus compañeros de partidos y los compañeros de otros partidos, empezaremos a respetarle o a darle en el cogote. Y digo días, pues el tiempo, a diferencia de lo que nos ha ido enseñando Mariano “El Rápido” sí importa. Quien muestra primero, muestra dos veces. Para bien y para mal. Y saber el equipo que llevará Patxi López es el fundamento de su apuesta.