Mujeres exigiendo una sociedad mejor

Hay muchas formas de significar que la mayoría de las mujeres del mundo se están ocupando de coger su espacio en la sociedad, ya que no somos capaces de dárselo los hombres y por desgracia, también muchas mujeres.

He elegido esta imagen por representar precisamente eso, la lucha para ocupar espacios, enfrente casi siempre de hombres que quieren defender el orden antiguo, Esta imagen es de Manila (Filipinas), enfrente de la Embajada de los EEUU, en una manifestación de mujeres conmemorando el Día Internacional de la Mujer.

Los carteles son contundentes. Las mujeres atacan al imperialismo, al neoliberalismo, golpean los órdenes económicos mundiales donde la sociedad tiene cada vez menos voz, menos posibilidades.

La fotografía es de: Bullit Márquez / Associated Press

Pavimentos en las islas Azores. Bellas calles


En la anterior entrada habíamos hablado de las Islas Azores, de una casa de indianos, muy similar a las que tenemos en el norte de España. Ahora quiero mostraros dos suelos, la decoración de dos calles de estas mismas islas, realizadas con adoquines negros y blancos, de granito diferente, formando dibujos geométricos.


El urbanismo amable, el que busca no sólo ser útil y funcional, sino además integrador para las personas, capaz de producir por poca más inversión, sensaciones agradables, está en aumento, buscando que pasear o simplemente transportarse andando desde un punto a otro, no sea una sucesión de aburridas zonas idénticas.


Este tipo de urbanismo además de ser útil para los turistas, en cuanto les representa un nuevo tipo de calle, lo es también y sobre todo para los vecinos de la ciudad, que son los que más disfrutan de estas actuaciones casi artísticas. La belleza es siempre lo más fácil de cuidar…, si se quiere.

Imágenes cortesía de Luis Iribarren

Pavimentos en las islas Azores. Bellas calles


En la anterior entrada habíamos hablado de las Islas Azores, de una casa de indianos, muy similar a las que tenemos en el norte de España. Ahora quiero mostraros dos suelos, la decoración de dos calles de estas mismas islas, realizadas con adoquines negros y blancos, de granito diferente, formando dibujos geométricos.


El urbanismo amable, el que busca no sólo ser útil y funcional, sino además integrador para las personas, capaz de producir por poca más inversión, sensaciones agradables, está en aumento, buscando que pasear o simplemente transportarse andando desde un punto a otro, no sea una sucesión de aburridas zonas idénticas.


Este tipo de urbanismo además de ser útil para los turistas, en cuanto les representa un nuevo tipo de calle, lo es también y sobre todo para los vecinos de la ciudad, que son los que más disfrutan de estas actuaciones casi artísticas. La belleza es siempre lo más fácil de cuidar…, si se quiere.

Imágenes cortesía de Luis Iribarren

Casa indiana en las Islas Azores

En anteriores entradas hablábamos de las casas de los indianos en Galicia y Asturias. Familias ricas que volvían de las américas a su España, siempre con el triunfo en sus maletas, pues los que eran trabajadores en las américas no volvían. Comerciantes que en muchos casos se volvían a España a poner en marcha los mismos negocios que habían logrado emprender en sus países de acogida. Era el principio del siglo XX en muchos casos.

Pero ahora os dejo un edificio de claro corte indiano situado en las Islas Azores. Lógicamente debemos pensar que en esta caso es un regresado desde Brasil. 


Bellos colores, mucha balconada a la calla, con galerías o sin ellas, florituras o motivos florales en la decoración, con escaleras de acceso a las viviendas unifamiliares, incluso en muchos casos con jardines alrededor que los envolvieran, pero siempre con las fachadas bien a la vista, pues estos regresos y edificaciones buscaban la muestra, el enseñar que se había triunfado.

El empedrado del suelo, de las aceras y zonas peatonales, nos dará para otra entrada posterior.

Casa indiana en las Islas Azores

En anteriores entradas hablábamos de las casas de los indianos en Galicia y Asturias. Familias ricas que volvían de las américas a su España, siempre con el triunfo en sus maletas, pues los que eran trabajadores en las américas no volvían. Comerciantes que en muchos casos se volvían a España a poner en marcha los mismos negocios que habían logrado emprender en sus países de acogida. Era el principio del siglo XX en muchos casos.

Pero ahora os dejo un edificio de claro corte indiano situado en las Islas Azores. Lógicamente debemos pensar que en esta caso es un regresado desde Brasil. 


Bellos colores, mucha balconada a la calla, con galerías o sin ellas, florituras o motivos florales en la decoración, con escaleras de acceso a las viviendas unifamiliares, incluso en muchos casos con jardines alrededor que los envolvieran, pero siempre con las fachadas bien a la vista, pues estos regresos y edificaciones buscaban la muestra, el enseñar que se había triunfado.

El empedrado del suelo, de las aceras y zonas peatonales, nos dará para otra entrada posterior.

¿Qué es la suerte? ¿Existe la suerte?

¿Qué es la suerte? ¿Existe la suerte? Pues un cierto componente de casualidad, de ese concepto que llamamos suerte y que muchas veces no es así, debe existir. Pero mucho menos de lo que nos imaginamos. La suerte hay que ir a buscarla. Y si viene sola, nos debe pillar trabajando.

La suerte es —muchas veces— algo tan simple como saber aprovechar efectivamente —y sobre todo activamente— los propios recursos que ya tenemos, para lograr con ellos lo que nos proponemos.

Existen oportunidades, existen momentos en los que se unen casualidades para poderlas aprovechar. Saber detectarlas, atreverse con ellas, atraparlas y seguir trabajando desde las nuevas oportunidades, no es suerte.


Hay que estar siempre con los ojos bien abiertos, por si llega la “suerte” y así atraparla. Si existe, se reparte muy bien, pero no todos sabemos detectarla y cogerla con la mano.

¿Qué es la suerte? ¿Existe la suerte?

¿Qué es la suerte? ¿Existe la suerte? Pues un cierto componente de casualidad, de ese concepto que llamamos suerte y que muchas veces no es así, debe existir. Pero mucho menos de lo que nos imaginamos. La suerte hay que ir a buscarla. Y si viene sola, nos debe pillar trabajando.

La suerte es —muchas veces— algo tan simple como saber aprovechar efectivamente —y sobre todo activamente— los propios recursos que ya tenemos, para lograr con ellos lo que nos proponemos.

Existen oportunidades, existen momentos en los que se unen casualidades para poderlas aprovechar. Saber detectarlas, atreverse con ellas, atraparlas y seguir trabajando desde las nuevas oportunidades, no es suerte.


Hay que estar siempre con los ojos bien abiertos, por si llega la “suerte” y así atraparla. Si existe, se reparte muy bien, pero no todos sabemos detectarla y cogerla con la mano.

Quien es el asesino? Está delatado

Puede parecer humor, y lo es, pero también dolor. Aunque las piedras no lo sientan. Pero nosotros sí, en nuestra forma de mirar. Un muerto, un asombrado y un malvado. ¿Quien es el asesino?

Y si la tormenta no pasa o se nos come?

A veces las tormentas vienen tan duras y se mantienen tantos días, que además de heridos hay desaparecidos. 

Ferrán Martín, una vez más pone humor y sentido común, juntos pero no revueltos.

Y si la tormenta no pasa o se nos come?

A veces las tormentas vienen tan duras y se mantienen tantos días, que además de heridos hay desaparecidos. 

Ferrán Martín, una vez más pone humor y sentido común, juntos pero no revueltos.

Desaparecerán los partidos políticos. ¿Y qué viene?

Ya se habla abiertamente que los partidos políticos pueden desaparecer. Que es un concepto caduco, del siglo XX y que ahora vamos caminando lentamente hacia "otra cosa" lo cual es posible o incluso muy posible.

El próximo Presidente de Francia no tiene partido político que lo sustente. Aquí a Ciudadanos aunque digamos lo contrario le sucede lo mismo, no existe en el territorio, ni falta que le ha hecho para obtener buenos resultados. No tuvo partido político el 15M y Podemos es la suma de muchas cosas y de muchos "depende".

¿Y si no hay partidos políticos en qué nos basamos para elegir o para gestionar? ¿No habíamos dicho que los cuadros eran fundamentales, que todo tenía que ser más horizontal?

Las Fundaciones o las Organizaciones políticas seguirán existiendo como viveros de cuadros necesarios. Pero el concepto de Partido es muy posible que desaparezca. La desafección política nos lleva a eso. Vuelven como es lógico, los líderes, las perdonas y sus equipos.

Vuelve el concepto griego de la excelencia, de la filosofía social, de la preparación y de las "escuelas" sociales y políticas. Estaremos atentos.

Cuartos de wc externos, en edificios de hace un siglo

Este tipo de galerías, de balconadas cerradas, se dieron en edificios viejos, construidos en muchos casos a principios del siglo XX con galerías abiertas que contenían en un lateral el servicio de water, y al que para acceder al mismo había que salir "casi" a la calle. En aquellos años todavía en muchas casas no existía servicio individual para cada vivienda, existían servicios de taza de wc entre plantas, que compartían varias familias, y esto solucionaba el problema de los olores, y la sensación de que tener un wc dentro del hogar era asqueroso.

Hay que recordar que hace un siglo el agua corriente no era habitual en todos los hogares, y menos en todas las habitaciones que lo necesitaran. Los wc internos (estos de galería o los comunales entre plantas) no tenían agua y se limpiaban con pozales o cubos. Y terminaban sus desagües en muchos casos en pozos negros.

Con los años estas galerías se cerraron, el water se integró en la vivienda, se puso agua corriente y se entendía normal y limpio este servicio que así quedaba integrado poco a poco en el hogar. Estas galerías cerradas en madera, anchas y con cuartuchos en un lateral, mejor o peor integrados en la vivienda, todavía se pueden ver en muchas ciudades, en sus cascos viejos. Sobre todo en sus zonas interiores de patios internos.

Cuartos de wc externos, en edificios de hace un siglo

Este tipo de galerías, de balconadas cerradas, se dieron en edificios viejos, construidos en muchos casos a principios del siglo XX con galerías abiertas que contenían en un lateral el servicio de water, y al que para acceder al mismo había que salir "casi" a la calle. En aquellos años todavía en muchas casas no existía servicio individual para cada vivienda, existían servicios de taza de wc entre plantas, que compartían varias familias, y esto solucionaba el problema de los olores, y la sensación de que tener un wc dentro del hogar era asqueroso.

Hay que recordar que hace un siglo el agua corriente no era habitual en todos los hogares, y menos en todas las habitaciones que lo necesitaran. Los wc internos (estos de galería o los comunales entre plantas) no tenían agua y se limpiaban con pozales o cubos. Y terminaban sus desagües en muchos casos en pozos negros.

Con los años estas galerías se cerraron, el water se integró en la vivienda, se puso agua corriente y se entendía normal y limpio este servicio que así quedaba integrado poco a poco en el hogar. Estas galerías cerradas en madera, anchas y con cuartuchos en un lateral, mejor o peor integrados en la vivienda, todavía se pueden ver en muchas ciudades, en sus cascos viejos. Sobre todo en sus zonas interiores de patios internos.

Construirnos una sala de descanso y relajación

En la imagen vemos una simple estancia para descansar, algo que saben ofrecer muy bien los Paradores en España, utilizando grandes edificios que fueron monasterios o similares. Pero en casa podemos aprender y copiar. Una estancia sin televisión, libros y revistas, una mesa moderna cómoda y funcional y un gran sofá cómodo para estar sentado, tumbado, hablando o leyendo. Y una música ambiental bajita y elegida según gustos.

Os puedo asegurar que no es tan complicado, y esto también es calidad de vida, que ayuda contra la depresión y el estrés mucho mejor que las pastillas.

Esta sala es del Parador del Monasterios de Corias, cerca de Cangas de Narcea.

Construirnos una sala de descanso y relajación

En la imagen vemos una simple estancia para descansar, algo que saben ofrecer muy bien los Paradores en España, utilizando grandes edificios que fueron monasterios o similares. Pero en casa podemos aprender y copiar. Una estancia sin televisión, libros y revistas, una mesa moderna cómoda y funcional y un gran sofá cómodo para estar sentado, tumbado, hablando o leyendo. Y una música ambiental bajita y elegida según gustos.

Os puedo asegurar que no es tan complicado, y esto también es calidad de vida, que ayuda contra la depresión y el estrés mucho mejor que las pastillas.

Esta sala es del Parador del Monasterios de Corias, cerca de Cangas de Narcea.

Las ventanas que no servían para ver

Cuando hablamos de urbanismo actual, y lo comparamos con los anteriores, debemos intentar comprender sus significados, las motivaciones que les llevaron a realizar algunas actuaciones que hoy nos parecen absurdas.

Hoy este tipo de ventanas son absurdas, pero por motivos de seguridad y religiosos, es decir sociales con arreglo a las formas de vida de hace (en este casi) once siglos, aquellas ventanas eran estrechas y casi sin sentido.

Servían únicamente para airear. No eran utilizadas ni para ver ni para ser vistos. Y si acaso para defenderse. La vida familiar se realizaba de puertas para dentro, y el sentido de la ventana y mucho más del balcón, vino siglos después, con la Reconquista y el cristianismo, más dado a la utilización de la calle como elemento de relación entre personas, a cambio del hogar que era el elemento cerrado y básico de las relaciones islámicas.

Con la ventana y el balcón todos se podían relacionar con mucha más facilidad. Y todos se podían vigilar también, con más astucia y éxito. La calle sirve para relacionarse y para conocerse, pero también para saber quien no quiere relacionarse, quien se relaciona con quien.




Las ventanas que no servían para ver

Cuando hablamos de urbanismo actual, y lo comparamos con los anteriores, debemos intentar comprender sus significados, las motivaciones que les llevaron a realizar algunas actuaciones que hoy nos parecen absurdas.

Hoy este tipo de ventanas son absurdas, pero por motivos de seguridad y religiosos, es decir sociales con arreglo a las formas de vida de hace (en este casi) once siglos, aquellas ventanas eran estrechas y casi sin sentido.

Servían únicamente para airear. No eran utilizadas ni para ver ni para ser vistos. Y si acaso para defenderse. La vida familiar se realizaba de puertas para dentro, y el sentido de la ventana y mucho más del balcón, vino siglos después, con la Reconquista y el cristianismo, más dado a la utilización de la calle como elemento de relación entre personas, a cambio del hogar que era el elemento cerrado y básico de las relaciones islámicas.

Con la ventana y el balcón todos se podían relacionar con mucha más facilidad. Y todos se podían vigilar también, con más astucia y éxito. La calle sirve para relacionarse y para conocerse, pero también para saber quien no quiere relacionarse, quien se relaciona con quien.




José Antonio, Girón, Perón y sus descamisados están partiéndose de risa

Podemos vetó a CHA y ahora se quejan de que la SER, que es una empresa privada, elija a unos y no a otras para sus tertulias. No es fácil de comprender desde el sentido común estas distintas varas de mediar, pero Podemos es así de nuevo. Es diferente.

Yo ya he escrito en varias ocasiones que Podemos se equivoca, y la verdad es que quien se equivoca soy yo, pues todo lo que aviso se convierte en camino emprendido con más fuerza cada vez. Hasta que la izquierda desaparezca..., que ya le queda poco.

Pero Podemos no es de izquierdas, simplemente porque ellos no creen en las izquierdas. Son otra cosa, esa new política que asombra y asusta a partes iguales. A mi me asombra, sin duda. Me asombra como pueden ser tan zotes siendo que vienen de la universidad. Equivocarse es lógico, pero persistir, sin valorar en donde se encuentran, es peligroso. Aunque eso a ellos les pone.

Tienen un tiempo para repensar, para reedificar, para construir cimientos suficientes, territorialmente sólidos. O no. Pero mientras tanto la derecha de todo color y movimiento se lo está pasando chupilerén. En Francia los trabajadores de sueldos justos han votado a Le Pen. Aquí ya hemos comprado libreta para tomar nota. José Antonio y Girón, Perón y sus descamisados, están partiéndose de risa.

Las casas de los indianos, atractivo turístico a conservar

En muchas zonas locales de los territorios donde más personas tuvieron que emigrar en los años malos de finales del siglo XIX o del principio del siglo XX, de Galicia, Cantabria, Asturias y País Vasco sobre todo, pero también en Cataluña, Canarias o Murcia y Valencia, es normal ver casas construidas por estas familias cuando volvían a sus territorios de nacimiento, tras los años de éxitos en América.

Son las casas conocidas como "indianas" por su urbanismo que se asemejan en forma y color, en los aleros o en las decoraciones y balconadas, a las casas de ciertos países o zonas de América Central o América del Sur.

Los indianos volvían ricos, siempre, pues los que no lograban el éxito en su periodo de migrantes, no volvían. Y los que lo hacían, en muchos casos, además de construir grandes casas en las mejores zonas de sus pueblos, solían convertirse en pequeños caciques locales, pues su dinero y su experiencia en el mundo de los negocios, le abrían las puertas del emprendimiento.

En algunas localidades del Norte de España, se conservan las casas que han superado los años malos de mitad del siglo XX y hoy son un atractivo más para las visitas turísticas a estas zonas.

Las casas de los indianos, atractivo turístico a conservar

En muchas zonas locales de los territorios donde más personas tuvieron que emigrar en los años malos de finales del siglo XIX o del principio del siglo XX, de Galicia, Cantabria, Asturias y País Vasco sobre todo, pero también en Cataluña, Canarias o Murcia y Valencia, es normal ver casas construidas por estas familias cuando volvían a sus territorios de nacimiento, tras los años de éxitos en América.

Son las casas conocidas como "indianas" por su urbanismo que se asemejan en forma y color, en los aleros o en las decoraciones y balconadas, a las casas de ciertos países o zonas de América Central o América del Sur.

Los indianos volvían ricos, siempre, pues los que no lograban el éxito en su periodo de migrantes, no volvían. Y los que lo hacían, en muchos casos, además de construir grandes casas en las mejores zonas de sus pueblos, solían convertirse en pequeños caciques locales, pues su dinero y su experiencia en el mundo de los negocios, le abrían las puertas del emprendimiento.

En algunas localidades del Norte de España, se conservan las casas que han superado los años malos de mitad del siglo XX y hoy son un atractivo más para las visitas turísticas a estas zonas.

¿Os interesa conocer el futuro de Europa y España?

Si les interesa saber el futuro de Europa, el de España también, analicen el comportamiento electoral en Francia, observen quien ha votado a la ultra derecha de Le Pen. Si es en zonas rurales o en las grandes ciudades, si son los jóvenes, los adultos o la tercera edad, si le han votado los trabajadores o los empresarios, los universitarios o las personas que piensan que la cultura es un aburrimiento.

Los estudios no sorprenden muchos a los que conocemos algo los movimientos sociales y políticos, pero marcan caminos que con urgencia hay que rectificar, eso sí, si se quiere una Europa capaz y unida, y tanto desde la derecha como desde la izquierda, se desea volver a ser tenidos en cuenta.

El populismo ha triunfado. El papel de los partidos políticos tradicionales está hundido. Los mensajes que mueven el voto son otros, los trabajos que hay que hacer para que la sociedad crea en la capacidad política es muy diferente a la que se suponía hace una década. O tomamos nota, o debemos abandonar.

Nueva política en Francia

Macron y Le Pen optarán a ser Presidentes de Francia, la segunda potencia de la Eurozona, tras una Primera Vuelta que ha supuesto como se preveía un cambio profundo en los partidos políticos franceses. Sin duda Macron será el nuevo Presidente de Francia, pero con una debilidad tremenda, pues ni tiene partido político estructurado para constituirse en referente capaz, ni cuenta de entrada con más de un 25% de apoyos, aunque al final sume los votos de casi todos, para frenar la ultraderecha de Le Pen.

Pero lo importante es comprobar que los franceses han mandado al banquillo a los socialista y a los gaullistas, a las dos fuerzas políticas que se han ido disputando el poder en Francia desde hace más de medio siglo.

Que los partidos tradicionales se hayan perdido es más que un síntoma, una realidad que está sucediendo en todo el sur de Europa. Aquí en España debemos tomar muy buena nota de ello. Los ganadores son una copia de Ciudadanos y una extrema derecha que nosotros tenemos dentro del PP.

Insostenible crecimiento poblacional

Cada día el mundo crece en unas 230.000 personas, que no son las que nacen (unas 390.000) sino la diferencia entre las que nacen y las que se mueren. Esto supone que cada 4 días y poco el mundo tiene un millón más de personas. Un millón que curiosamente ninguno es aragonés, que necesita comer, emplear agua y energía, ocupar un espacio vital tanto él como lo que consume. Porque el mundo no crece, seguimos estando en el mismo espacio físico.

En el año 1970 éramos en el mundo la mitad de personas de las que somos hoy. En 45 años nos hemos duplicado. Si seguimos mirando hacia atrás, la anterior duplicación necesitó 60 años para producirse. Y la anterior unos 130 años. Y sobre unos 500 años la anterior. Exponencialmente es cruda la realidad.

Nadie se atreve a decir cuántos habitantes tendrá el planeta dentro de otros 45 años, y los cálculos nos hablan de unos diez a once mil millones, basándonos en el crecimiento actual. Hay que entender que cuanto más bienestar social hay en los países, menos tasa de fecundación y aparentemente se está frenando el crecimiento exponencial.

Yo tengo 61 años recién cumplidos. El día de mi nacimiento había en el planeta 2.796.082.786 personas. Hay relojes que te muestran casi todo, y por ello sabemos que hoy estamos en el mundo 7.499.552.232 personas. Crecimiento brutal que hace sonar las alarmas de la sostenibilidad. Si a estos números le añadimos que el consumo diario de energía, de agua, de alimentos, de naturaleza muerta, es inmensamente superior por persona que en el año 1956, vemos más todavía que es imposible un crecimiento con esta magnitud.

Algunos teóricos hablan claramente de la solución fácil de poner controles de natalidad, libres y fáciles, a costa de más sistemas de planificación y de más calidad de vida y libertad para las mujeres y las familias. El otro mecanismo de control de la población es terriblemente más sangriento. ¿O acaso creemos que el mundo es infinito y que estos datos son falsos?

Vamos a ver un ejemplo sencillo de entender. Pakistán. Tiene una superficie que es 1,5 veces la de España, o unas 16 veces la de Aragón. Pero en cambio tiene 4,2 veces la población de España, y 151 veces la población de Aragón. Ni España crece, ni Aragón crece. Pakistán crece poco, pero aun así supera el millón de más habitantes cada año entre los 1,7 millones que nacen y los 0,43 millones que mueren.

Insostenible crecimiento poblacional

Cada día el mundo crece en unas 230.000 personas, que no son las que nacen (unas 390.000) sino la diferencia entre las que nacen y las que se mueren. Esto supone que cada 4 días y poco el mundo tiene un millón más de personas. Un millón que curiosamente ninguno es aragonés, que necesita comer, emplear agua y energía, ocupar un espacio vital tanto él como lo que consume. Porque el mundo no crece, seguimos estando en el mismo espacio físico.

En el año 1970 éramos en el mundo la mitad de personas de las que somos hoy. En 45 años nos hemos duplicado. Si seguimos mirando hacia atrás, la anterior duplicación necesitó 60 años para producirse. Y la anterior unos 130 años. Y sobre unos 500 años la anterior. Exponencialmente es cruda la realidad.

Nadie se atreve a decir cuántos habitantes tendrá el planeta dentro de otros 45 años, y los cálculos nos hablan de unos diez a once mil millones, basándonos en el crecimiento actual. Hay que entender que cuanto más bienestar social hay en los países, menos tasa de fecundación y aparentemente se está frenando el crecimiento exponencial.

Yo tengo 61 años recién cumplidos. El día de mi nacimiento había en el planeta 2.796.082.786 personas. Hay relojes que te muestran casi todo, y por ello sabemos que hoy estamos en el mundo 7.499.552.232 personas. Crecimiento brutal que hace sonar las alarmas de la sostenibilidad. Si a estos números le añadimos que el consumo diario de energía, de agua, de alimentos, de naturaleza muerta, es inmensamente superior por persona que en el año 1956, vemos más todavía que es imposible un crecimiento con esta magnitud.

Algunos teóricos hablan claramente de la solución fácil de poner controles de natalidad, libres y fáciles, a costa de más sistemas de planificación y de más calidad de vida y libertad para las mujeres y las familias. El otro mecanismo de control de la población es terriblemente más sangriento. ¿O acaso creemos que el mundo es infinito y que estos datos son falsos?

Vamos a ver un ejemplo sencillo de entender. Pakistán. Tiene una superficie que es 1,5 veces la de España, o unas 16 veces la de Aragón. Pero en cambio tiene 4,2 veces la población de España, y 151 veces la población de Aragón. Ni España crece, ni Aragón crece. Pakistán crece poco, pero aun así supera el millón de más habitantes cada año entre los 1,7 millones que nacen y los 0,43 millones que mueren.

La importancia de las NO decisiones

Sabemos cómo es nuestra sociedad, de qué forma funcionamos, hacia donde parece que vamos. Sabemos qué nos está sucediendo. Esto último, casi, pues hay muchas cosas que se nos ocultan. Pero lo que no sabemos es hacia donde debería haberse movido nuestra sociedad, si se hubiera actuado de otra forma.

No podemos saber en qué punto nos encontraríamos hoy, si se hubieran tomado medidas sociales y políticas distintas, en cada momento clave de nuestra historia mundial, europea, española o zaragozana.

Y es precisamente en este punto donde nunca pedimos responsabilidades a los que gestionan, cuando es en realidad un asunto crucial para los resultados.

Criticamos lo que se hace.

Pero no criticamos lo que NO se hace.

La sociedad se mueve a golpe de unas decisiones que conocemos, pues se toman y las vivimos, las vemos. Sean positivas o negativas. Pero desconocemos todas las decisiones que se han analizados y se quedaron sin realizar por diversos motivos. Y sin duda, desconocemos más, aquellas decisiones que nunca se evaluaron y por consiguiente nunca formaron parte de las posibles.

Esta semana estuve en una mesa de trabajo para tomar decisiones muy importantes sobre una gran ciudad. Se evaluaron decenas de propuestas teóricas, se eligieron tras unos análisis profundos algunas de ellas, y ahora hay que darles cuerpo, forma, financiación, sentido social y llenarlas de contenido, incluso de técnicos que las pongan a trabajar.

Los asistentes éramos (la mitad) todos políticos. ¿Un desastre verdad? Noooo. Éramos cinco políticos asistidos por cuatro grandes técnicos. Tranquilos todos. Incluso os diría que los políticos…, igual somos gentes que sabemos leer y escribir y en nuestra vida anterior hemos podido ser también técnicos. Hay de todo en la viña de donde sale el buen vino. Y el malo.

Lo que quiero mostrar sobre estas líneas, es que la suma de decisiones, de descartes, de opiniones encontradas entre ideologías muy diferentes, han logrado un resultado. Pero podrían haber salido decenas de ellos, totalmente distintos unos de los otros.

Con el tiempo, en este caso en el medio plazo, se nos podrá juzgar por nuestras decisiones, pero nunca se nos podrá juzgar por las decisiones de este jueves, pues nadie sabe qué ha quedado descartado. Y posiblemente algunas de esas ideas fueran más influyentes que las elegidas. O más catastróficas.

La importancia de las NO decisiones

Sabemos cómo es nuestra sociedad, de qué forma funcionamos, hacia donde parece que vamos. Sabemos qué nos está sucediendo. Esto último, casi, pues hay muchas cosas que se nos ocultan. Pero lo que no sabemos es hacia donde debería haberse movido nuestra sociedad, si se hubiera actuado de otra forma.

No podemos saber en qué punto nos encontraríamos hoy, si se hubieran tomado medidas sociales y políticas distintas, en cada momento clave de nuestra historia mundial, europea, española o zaragozana.

Y es precisamente en este punto donde nunca pedimos responsabilidades a los que gestionan, cuando es en realidad un asunto crucial para los resultados.

Criticamos lo que se hace.

Pero no criticamos lo que NO se hace.

La sociedad se mueve a golpe de unas decisiones que conocemos, pues se toman y las vivimos, las vemos. Sean positivas o negativas. Pero desconocemos todas las decisiones que se han analizados y se quedaron sin realizar por diversos motivos. Y sin duda, desconocemos más, aquellas decisiones que nunca se evaluaron y por consiguiente nunca formaron parte de las posibles.

Esta semana estuve en una mesa de trabajo para tomar decisiones muy importantes sobre una gran ciudad. Se evaluaron decenas de propuestas teóricas, se eligieron tras unos análisis profundos algunas de ellas, y ahora hay que darles cuerpo, forma, financiación, sentido social y llenarlas de contenido, incluso de técnicos que las pongan a trabajar.

Los asistentes éramos (la mitad) todos políticos. ¿Un desastre verdad? Noooo. Éramos cinco políticos asistidos por cuatro grandes técnicos. Tranquilos todos. Incluso os diría que los políticos…, igual somos gentes que sabemos leer y escribir y en nuestra vida anterior hemos podido ser también técnicos. Hay de todo en la viña de donde sale el buen vino. Y el malo.

Lo que quiero mostrar sobre estas líneas, es que la suma de decisiones, de descartes, de opiniones encontradas entre ideologías muy diferentes, han logrado un resultado. Pero podrían haber salido decenas de ellos, totalmente distintos unos de los otros.

Con el tiempo, en este caso en el medio plazo, se nos podrá juzgar por nuestras decisiones, pero nunca se nos podrá juzgar por las decisiones de este jueves, pues nadie sabe qué ha quedado descartado. Y posiblemente algunas de esas ideas fueran más influyentes que las elegidas. O más catastróficas.

No cuidar el planeta es de cafres egoístas

Si ni tú ni yo somos inmortales…, ¿por qué pensamos que el mundo será inmortal? Entiendo que no nos preocupemos por el mundo, pues pensamos que ya no estaremos aquí cuando pete, pero no sé, me parece puro egoísmo que por no estar, ya no nos importa lo que hacemos con el contenedor.

¿No somos un atajo de tontos, egoístas que vamos caminando hacia el abismo de la mierda? El fin y al cabo serán nuestros descendientes lo que se cagarán en nuestros huesos. Antes una generación era una división de unos 30 años entre ellas. Así que hace 15 generaciones tus y mis antepasados observaban cómo se conquistaba América. Mis tataranietos serán la cuarta por delante. Visto así, no cuidar el planeta es de cafres.

10 normas básicas para ayudar aprender

Todos tenemos que aprender, estamos constantemente aprendiendo. Y aprendemos de la experiencia de otros. Por cada persona que necesita aprender, hay otra persona que enseña, sabiendo que enseña o sin saberlo. La interdependencia de unos con otros es muy importante, siempre positiva y gratificante para crecer como personas cada vez más válidas. ¿Cómo podemos ayudar a otras personas, niños o adultos, a que aprendan?

Estableciendo metas claras y posibles
Premiando los logros conseguidos
Compartiendo recursos y conocimientos
Asignando tareas individuales
Respetando las personalidades de cada persona que aprende
Utilizando la imaginación para enseñar, mostrar, comunicar
Actuando frente a los problemas de aceptación, adaptación
Resolviendo los problemas exteriores que puedan afectar a la motivación
Lograr empatía entre personas que enseñan y aprenden
Poner en valor el crecimiento personal y el esfuerzo