Me preocupan las lanzas de Corea del Norte

La propaganda militar es más simpática que la de los yogures. Y más peligrosa. Ahora ya sabemos que los misiles de Corea del Norte se llaman Pukguksong 1 y Pukguksong 2, que siendo que ellos los escriben en coreano raro, bien podríamos haberlos traducido a un nombre más normal. No sé, Petardo 1 y Petardo 2, por poner un ejemplo.

En esta semana nos hemos enterado que la madre de todas las bombas ha matado en un pepinazo del siglo XXI a unas 100 personas. Algo muy importante para esas 100 personas.

Pero se nos olvida recordar que en Dresde —por poner un simple ejemplo— en dos días y cuando faltaban pocas semanas para acabar la II Guerra Mundial se mataron entre 25.000 y 35.000 personas con los bombardeos indiscriminados de los ejércitos USA e ingleses, que destrozaron una ciudad ma´´ de la Alemania nazi.

Estos coreanos nos han enseñado para acojonarnos un poco más los temidos misiles Musafan y los misteriosos KN-08 y KN-14 con la enorme duda de qué habrá sido de los KN-09, 10, 11, 12 y 13, que ya no los sacan a pasear.


Aunque a mi lo que me preocupa es la imagen segunda. Si de cada seis soldados con cara de malos, cinco de ellos llevan esas lanzas con una punta tan gruesa ¿para que la quieren emplear? ¿dónde desean meterla en caso de un cuerpo a cuerpo? Jodo qué miedo me da. Me voy a duchar por si acaso.