Daría igual qué hiciéramos nosotros hoy, pues el mañana volvería a salir y a ofrecernos su mirada.
Por eso es imprescindible que nos creamos el futuro como algo que nos pertenece ya.
No está por venir, está entre nosotros, lo podemos modelar desde ahora mismo.
El futuro nos pertenece, será nuestro, lo vamos a vivir.
Así que intentemos al menos que sea positivo, mejor que el pasado.