Veo las noticias, las leo incluso, observo titulares…, y sin querer voy buscando donde me están engañando. Sé que parte son falsas, manipuladas para crear estado de opinión. Unas y otras, según las observo, se contradicen. Alguien se está equivocando. Incluso yo. Pero si la prensa ha perdido la credibilidad, mis ideas han perdido credibilidad, todo lo que me rodea ha perdido credibilidad.
Y esto es el principio de la nada, del vacío, de la desafección negativa. hay dos clases de desafecciones, la temporal y la perpetua. Esas manipulaciones que ahora llamamos posverdad, nos están pudiendo. Antes lo llamábamos amarillismo y lo entendíamos todos enseguida, ahora hemos aplicado la posverdad al amarillismo y lo llamamos posverdad. Estamos en la posverdad de la posverdad.