Si para evitar que Cataluña deje de ser España hay que cerrarles la página web, cortarles la luz a los colegios el día 1 o registrar revistas e imprentas en búsqueda de folletos, es que nos estamos volviendo locos o vivimos en un país poco democrático.
Uno siempre piensa que ante los grandes problemas se necesitan grandes soluciones. Pero estas parecen más de Mortadelo que del 007.
Votarán sin luz, la página web la alojarán en China, las papeletas se las imprimirán en su casa y cambiarán de alcaldes o de Jefe de Policía cada dos días.
Vamos a asistir a unas votaciones tipo Gila y a unas defensas para evitar la independencia tipo Filemón. Yo sentencio, y yo no hago caso a nadie. Yo pongo millonarias multas y nosotros las pagamos a escote. Incluso desde Madrid ya han dividido el número de Mossos entre los colegios electorales y les salen las cuentas. Pero eso sí, tendrán que vigilar con linternas.