Teorías del Premio Nobel de Economía 2017: Richard Thaler

El Premio Nobel de Economía del año 2017, Richard Thaler nacido en el año 1945, no era un desconocido en el mundo económico europeo, y sus teorías o mezcla de teorías económicas eran bien conocidas incluso antes de que él las pusiera sobre la mesa mediática, pues la sociología y la psicología sin duda, tiene un componente enorme sobre las decisiones económicas de las personas, que son las que finalmente gestionan mercados de todo tipo con sus decisiones, sean consumidores, ahorradores o empresarios e inversores.

Y por eso mismo, por sus teorías aceptadas aunque se quieran negar o no admitir en todo su valor, es por lo que los mercados de todo tipo inciden —sin que nadie lo note mucho—, sobre las decisiones que teman las personas con sus dineros, sus trabajos, sus movilidades económicas de todo tipo. 

Muchas veces manipuladas, sobe todo por los que quieren seguir gobernado con los dineros de todos. Incluso gobernando sobre sus propios dineros.

Os dejo un artículo sobre Richard Thaler publicado en retina.elpais, para conocerlo un poco mejor. 

Y os añado unas frases suyas:

“Tras la Segunda Guerra Mundial se trató de aportar rigurosidad matemática a la economía pero la profesión parece haber perdido la buena intuición sobre el comportamiento humano. En los textos de economía ya no hay humanos. ¿Cómo pudo ocurrir esto?”

“Consideremos la siguiente lista de actividades económicas: decidir cuánta leche comprar en la tienda, elegir un suéter, comprar una casa, elegir una profesión, cuánto ahorrar… Es verdad que la práctica mejora los resultados en la mayoría de las actividades. Muchas familias han llegado a dominar el arte de la gestión del inventario de leche a base de prueba y error. Pero pocos de nosotros compramos tan a menudo coches como para ser muy buenos en ello. En las grandes decisiones hay poco espacio para el aprendizaje”. 

"Tendemos a darle más peso al presente en nuestras decisiones y terminamos cometiendo errores. Preferimos comprar algo que nos satisfaga hoy frente a una ganancia futura. Estas preferencias pueden hacer que tomemos decisiones poco consistentes o irracionales. El entorno, la forma, el orden en la que se nos presentan todas las opciones influirá también en nuestra decisión".


Os dejo sus Conceptos básicos de pensamiento económico sacados de Wikipedia, para entender algo mejor lo que sería la economía conductual, la microeconomía de la conducta de las personas a la hora de utilizarla, muchas veces sin darnos cuenta de ello:

"La economía tradicional no es incorrecta, pero se puede mejorar": Los modelos tradicionales suponen que siempre tomamos la decisión mejor para nosotros, teniendo en cuenta las circunstancias y que lo único que nos hace felices es nuestro propio interés, que no tenemos problemas de autocontrol o que nuestras creencias y opiniones no están sesgadas.

"Supuesto de optimización plausible": Ya que hay tareas que nos resultan más difíciles que otras, es decir, en las que cometemos más errores, y que hay personas más inteligentes que otras, es decir, que cometen menos errores que otros, si vamos a hacer prescripciones de política económica debemos antes enriquecer el modelo y entender que las fricciones existen.

"¿Qué puede ser la economía sino una ciencia sobre el comportamiento?": La economía estudia comportamiento de los individuos cuando toman decisiones económicas. El problema surge cuando nuestros modelos no son todo lo realistas que debieran. Los seres humanos cometemos "errores" sistemáticos y queremos entender de dónde vienen y a qué llevan.

"No es un aspecto secundario de la teoría económica": No es cierto que aunque las motivaciones de los modelos económicos sean simplificaciones, al final los sujetos se comportan "como si" esos modelos fueran ciertos. 

En la mayor parte de las situaciones no nos comportamos como predicen los modelos. Resulta que precisamente aquellas decisiones más difíciles, comprar una casa, contraer matrimonio, elegir una profesión.... son aquellas que decidimos pocas veces y sobre las que es difícil aprender por propia experiencia.

"Los mercados no son perfectos": Los modelos económicos tradicionales postulan que 1) "nada es gratis", que quiere decir que no se puede "vencer" al mercado y por tanto poder beneficiarse del arbitraje y que 2) los precios de los activos son igual a su valor intrínseco, es decir, que realmente no existen las burbujas. 

La realidad nos muestra los amplios márgenes de intermediación de los que se benefician los agentes que operan en el mercado mejor informados y posicionados. Por otro lado la recurrente formación de burbujas en los mercados y sus periódicos estallidos refutan la teoría del valor tradicional.

"Sesgo del presente": Tendemos a darle más peso al presente en nuestras decisiones y terminamos cometiendo errores. Preferimos comprar algo que nos satisfaga hoy frente a una ganancia futura. Estas preferencias pueden hacer que tomemos decisiones poco consistentes o irracionales.

"Demasiados factores supuestamente irrelevantes": Según la economía tradicional, los llamados "costes sumergidos" (los derivados de decisiones erróneas pasadas que no podemos recuperar) no deberían afectar nuestras decisiones de inversión presentes, ni la forma de presentar un problema ("framing") debería cambiar nuestra elección porque nos dieran una opción u otra por defecto. 

Sin embargo está demostrado que muchos inversores siguen invirtiendo en algo, no porque crean que vaya a rendirles más en el futuro, sino porque con lo que ya han invertido en el pasado es difícil asumir que se trata de dinero perdido. Igualmente las decisiones por defecto, como en el caso de la donación de órganos, influyen grandemente en los resultados globales efectivos de las mismas.

"Hacia las políticas basadas en la evidencia...y la teoría basada en la evidencia": Tomar medidas políticas sin tener evidencia empírica sobre si van a funcionar es una temeridad. Por ello el uso de experimentos de campo a pequeña escala sirve para diseñar y mejorar dichas medidas. 

Thaler cree que el problema viene de que usamos la teoría para dos funciones distintas: 1) encontrar la mejor manera de resolver un problema y 2) describir cómo la gente resuelve los problemas. 

Desgraciadamente, dado que nos parecemos más a Homer Simpson que al consumidor tipo de la teoría tradicional, ambas funciones son distintas. En los últimos 20 años se han multiplicado las teorías económicas que incorporan aspectos psicológicos más realistas (la teoría "prospectiva", modelos de decisión intertemporal con sesgos, modelos de preferencias sociales, de puntos de referencia, de racionalidad limitada...), y poco a poco se van incorporando a todos los campos como algo estándar.

"Orígenes de la Economía conductual": Thaler recurre a algunos de los "padres" de la Economía cuando busca las raíces de la Economía del Comportamiento. 

Por ejemplo, cita el "otro" libro de Adam Smith, "La Teoría de los Sentimientos Morales" como la base sobre la que luego se han construido modelos sobre exceso de confianza ("overconfidence"), aversión a la pérdida ("loss aversion") o los problemas de autocontrol. Igualmente, nombra a John Maynard Keynes como el primero en introducir aspectos psicológicos en el campo de las finanzas ("Behavioral Fiance") y reivindica a Vilfredo Pareto por su convicción en que los fundamentos de la Economía han de estar basados en la Psicología.