Esta en la avenida de Broadway, junto a Wall Street, en una zona carísima y en donde los jardines y el cementerio ocupan un espacio importante. No es la única ciudad. En Europa sucede en bastantes ciudades y países.
Las personas necesitan seguir teniendo allí el recuerdo de su historia. Valoran algo imprescindible. Y es que ese espacio no les pertenece a las generaciones actuales sino a las anteriores. Tenga el coste (valor) actual que tenga ese terreno.
Todos nosotros estamos en las ciudades de paso, somos meros transeúntes de la ciudad, donde incluso no garantizamos que vayamos a estar hasta nuestro fallecimiento. Así que cualquier decisión en urbanismo hay que hacerla con sumo cuidado. Atendiendo a la temporalidad de nuestro paso por el lugar. Nada nos pertenece, y todo debemos cuidarlo y mejorarlo pensando en el futuro, sin olvidarnos del pasado.