En el País Vasco (francés) se han reunido los del G7 que por si no lo sabemos son los amos, los dueños del mundo mundial aunque ellos tengan que obedecer a sus “Jefes” que son otros amos. Estamos llenos de amos, es decir, somos unos meros esclavos del siglo XXI.
Ahora la participación es breve y manipulada, pero no sucede nada, ya nos hemos acostumbrado a eso. Como dice el texto de arriba, hay que aprender a convivir de forma comunitaria y si la mayoría cree que es tiempo de rumores y mentiras lo mejor es decir amén, vayas o no vayas a la iglesia.
Se nos va el calor y tras jodernos durante unas semanas de exceso no es capaz ni de despedirse escapándose de tapadillo. El sol ya no sale por donde antes, aunque bien mirado somos nosotros los que nos hemos movido. Y lo curioso es que nos movemos sin darnos cuenta. Desde siempre. Incluso en nuestras empresas, en nuestras relaciones.
Los domingos toca paella. Hoy de setas con langostinos. Depende del domingo. Y del cocinero, servidor de vosotros, aunque no os voy a invitar a paella. Sin cebolla claro. Con ajo, algo de romero y un toque de vino rancio. Cosas de la vieja cocina vieja. La tortilla española sí, con cebolla, pero sin que se note en la boca. La cebolla muy picada y dando suavidad y algo de sabor. Pero sin que se note nada más.