Todo lo que hacemos tiene importancia. No hacerlo también. Todo son decisiones que se nos van amontonando. Todas nos afectan. Incluso algunas de ellas mucho más de lo que pretendemos al tomarlas. Es la vida, la ley de la selva vital. Creo que hoy he mandado a tomar por el culo a un buen montón de amiguetes, pero es que estoy hasta…, estoy cabreado.
Hoy han operado de cáncer a una amiga. El cáncer dentro de unos años, de unas décadas, será la enfermedad crónica que molestará. Pero no matará. Y se acordarán de ella en clave de comparación, diciendo que de ella se moría antes. Hoy ya empieza a ser una crónica enfermedad dura de complejo tratamiento. Que asusta sobre todo. Que marca la vida. Poco a poco.
Se acaba agosto, empiezan a volver aves del norte marcadas no tanto por el frío como por sus relojes biológicos. Empezará septiembre con todo sin hacer. Lo malo es que incluso no sabemos qué hacer. Creemos que sí, que todo lo tenemos controlado, que somos capaces. pero en realidad marcamos un inicio del siglo XXI (y llevamos 19 años) con muchas dudas y cada vez menos capacidades.