Lo dice El Roto y lo decimos muchos de los que no nos dejamos encuadrar porque hemos sabido salirnos antes de caer en la trampa. Hay grupos de personas que intentar meternos en cuadras como al ganado a base de enmarcar nuestros pensamientos entre maderas que pulen las aristas para que no haya diferencias libres.
Una vez encuadrados tienes que moverte poco, comer de lo que te den y mirar por el rabillo del ojo. Si eres alto, a lo sumo, puedes sacar la cabeza para mirar fuera, si eres de los pequeños ni eso.