Mi respuesta ha sido SI con algunos matices. No es lógico tener en estos tiempos de facilidad para tener en el ordenador varios currículum uno solo de ellos. Depende.
Hay que tener varios currículum de cada persona, adaptados a los diversos perfiles profesionales a los que desees acceder, e incluso si son puestos muy técnicos o importantes, deberían ser currículum personalizados para cada ocasión.
Ante una selección de personas se reciben decenas o cientos de documentos con muy diversos perfiles. La persona que hace la primera selección que no es el mejor profesional de la misma, analiza y retira o agrupa los curriculum recogidos por diversas pautas que le han indicado.
La originalidad en el curriculum es un activo importante. No tanto para un puesto simple o sencillo, como para un puesto de trabajo donde la selección será compleja.
Si ante la repetición de mandar curriculum a decenas (o a cientos) de lugares no se te llama casi nunca, es que algo falla en ese curriculum. O bien los datos, o bien los deseos de formar parte de un tipo determinado de empresas.
Llamarte es el primer objetivo de un currículum, y cuando no se fijan en tus datos para llamarte tan siquiera, es que hay que tirarlo a la basura y empezar de nuevo. No digo que haya que mentir, pero sí tal vez decir la verdad de otra manera. A veces ser muy académico si no funciona nos obliga a ser más libres, más diferentes, más osados.
Y sí, puede ser bueno poner en la cabeza de tu hoja de entrada al despacho de la selección un apartado de habilidades sociales. Como lo es aportar el motivo que te lleva a pedir entrar en su organización demostrando que la conoces. O indicarles las capacidades que tienes en campos diversos al del puesto de trabajo al que quieres optar.
Ante una selección de personas se reciben decenas o cientos de documentos con muy diversos perfiles. La persona que hace la primera selección que no es el mejor profesional de la misma, analiza y retira o agrupa los curriculum recogidos por diversas pautas que le han indicado.
La originalidad en el curriculum es un activo importante. No tanto para un puesto simple o sencillo, como para un puesto de trabajo donde la selección será compleja.
Si ante la repetición de mandar curriculum a decenas (o a cientos) de lugares no se te llama casi nunca, es que algo falla en ese curriculum. O bien los datos, o bien los deseos de formar parte de un tipo determinado de empresas.
Llamarte es el primer objetivo de un currículum, y cuando no se fijan en tus datos para llamarte tan siquiera, es que hay que tirarlo a la basura y empezar de nuevo. No digo que haya que mentir, pero sí tal vez decir la verdad de otra manera. A veces ser muy académico si no funciona nos obliga a ser más libres, más diferentes, más osados.
Y sí, puede ser bueno poner en la cabeza de tu hoja de entrada al despacho de la selección un apartado de habilidades sociales. Como lo es aportar el motivo que te lleva a pedir entrar en su organización demostrando que la conoces. O indicarles las capacidades que tienes en campos diversos al del puesto de trabajo al que quieres optar.
Pero CUIDADO, esa zona de tu currículum la carga el Diablo. Te la van a mirar con lupa. Si es en positivo, si has sabido elegir bien lo que dices que eres…, es positiva. Pero las posibilidades de que se vuelva en tu contra son mayores.
Recuerdo un currículum donde una aspirante me decía que había sido Presidente de la Comunidad de Vecinos. Eso es muy poco e indica que no hay más chicha de la que exponer habilidades.
Recuerdo un currículum donde una aspirante me decía que había sido Presidente de la Comunidad de Vecinos. Eso es muy poco e indica que no hay más chicha de la que exponer habilidades.
En cambio si dices que has sido Presidenta de la Asociación XXXX para la Defensa de XXXX, la cosa cambia. No lo has sido por obligación sino por elección de otras personas y tienes capacidad de organización y de mando. Pero te preguntarán por qué dejaste de serlo. Así que prepara la respuesta con anterioridad.