Es tiempo de escribir, de sacar las ideas del cajón de la cabeza y mostrártelas a ti mismo, envueltas en letras y papel. Bueno, seamos sinceros, lo de menos es el papel, ahora se estila escribir en digital y luego ya iremos viendo. El confinamiento nos ha brindado tiempos muertos, que se pueden utilizar de muchas y variadas maneras. Lo importante sería que algunas de ellas se nos quedaran más tiempo, aunque te voy a decir un secreto que tú… que ya sabes. Esto va a durar varios meses más, posiblemente no tan duro como ahora.
Escribir está bien, pero no aspires a nada más antes de ponerte a escribir. Escribir porque te gusta escribir, por pensar y modelar situaciones, paisajes, escenas, personajes, ideas. Escribir es un complemento maravilloso a leer. Y al revés. Si te gusta una cosa lo normal es que te guste la otra. Se complementan.
Y no intentes escribir para premios, e incluso tampoco para publicar, aunque nunca ha sido tan sencillo publicar… o mejor dicho autopublicar, como en estos tiempos en que en digital te pueden hacer libros con tu pdf por poco dinero. Eso sí, maquetado ya, pero todos tenemos amigos que nos pueden ayudar en esa tarea.
Un Diario sirve, ahora están de moda otra vez, pero intenta que sea un Diario distinto a un día tras otro día, revisa ideas de otros, lee algunos ejemplos, adapta a tu forma de entender el día a día la escritura diaria de pensamientos o reseñas, o recopilaciones, o fotografías con textos. Las posibilidades son muchas más de las que te imaginas ahora, simplemente busca y rebusca, copia sin copiar y lee. Y eso si… escribe. Es incluso una excelente terapia.