En estos días de verano donde tenemos a nuestros hijos o nietos en casa más tiempo que en otros periodos y además con un confinamiento que parece no acabar nunca, no es mala idea que saquemos del cajón algunas viejas ideas, algunos pequeños ejercicios de pintura para que nuestros niños practiquen simplemente dando color.
Se deben utilizar figuras muy conocidas por ellos para que no tengan dudas con los colores que deben aplicar, y estos ejercicios son válidos casi para cualquier edad que ellos mismos quieran practicar. Y son útiles pues sirven para varios ejercicios distintos.
Estas frutas se pueden dibujar con lápices en blanco y negro y carboncillo para darles volumen y repasar las líneas y perfiles. O se pueden utilizar para colorear con lápices de colores. O también con acuarelas o con temperas. O con rotuladores de colores. O se puede jugar a cambiarles los colores y pintar una pera morada o un melocotón verde. O una cerezas naranjas o lilas.