En este 2020 pandémico y estratégicamente muy interesante para el futuro del siglo XXI están funcionando únicamente dos modelos económicos, una vez que el comunismo desapareció totalmente excepto pequeños reductos sin importancia y el socialismo no ha sabido conservar ni tan siquiera las ideas. Uno es el Capitalismo de Empresarios y el otro el Capitalismo de Estado.
Ambos son capitalismos nuevos, reordenados.
Donde en el primer caso las Grandes Corporaciones se han ido adueñando de todos los sectores estratégicos incluido el dinero, las acciones y los sectores primarios, permitiendo y consintiendo la existencia de pequeñas empresas, autónomos, incluso grandes empresas que en apariencia son “libres” pero que están dominadas en sus Consejos de Administración o en el reparto de sus acciones por muy diversos órganos de presión.
Existe la gran duda aparente de saber quien manda realmente en ese Capitalismo de los Empresarios, donde todo se mezcla, donde nadie es quien parece, donde incluso se juega con países dentro de países que son simples espacios para pagar menos impuestos, para saltarse las normas fiscales o empresariales que ellos mismos se ponen y ponen a los que no pertenecen a su “Grupo” de presión.
El Capitalismo de Estado, sin ninguna duda también Capitalismo, es el que actualmente está ampliando y contagiando China hacia África sin duda y hacia algunos países de América Latina para apoderarse del sistema Capitalista de Empresarios que ya demuestra cansancio incluso estratégico. En este Sistema Capitalista los que cumplen con el papel de empresarios son los grandes Funcionarios fijos del Estado, que utilizando los mismos mecanismos del otro sistema, influyen, dominan, se apoderan de sectores estratégicos utilizando el sistema Capitalista para que funcionen libres en apariencia, como mecanismo de eficacia productiva.
Esta división entre los dos Sistemas Económicos de esta décadas son los que en la actualidad se pelean por dominar el mundo.Y cada uno está liderado por una gran potencia. Los EEUU y China. Quedan fuera, esperando, intentando entender de qué manera pueden meter el morro tanto Rusia como Europa e incluso India y los países árabes. ¿Quién dominará el mundo a partir de la salida de la pandemia? ¿Se juegan el futuro en el tableo de África y América Latina, para ver quién se posiciona mejor?