El casi editorialista de El País, el muy conocido El Roto, en el año 2005 nos advertía de lo ajetreada que tenemos montada la vida. Bueno, es lo que hemos querido hacer, o lo que nos hemos querido montar a nuestro alrededor.
La vida laboral puede organizarse mucho mejor y en estos tiempos de pandemia en los que incluso hemos tenido que cerrar todo el país durante dos semanas hemos podido comprobar que lo importante no es lo mismo que lo urgente.
Pero seguiremos trabajando sin parar para infartarnos nosotros mismos.