El Síndrome de la Clase Turista en los viajes de avión que superan las 3 ó 4 horas se basa en el riesgo de padecer trombosis venosa o embolia pulmonar en aquellos viajes de avión en los que permanecemos mucho tiempo sentados y sin movernos. Se llama "de Clase Turista" porque a las muchas horas de viaje se une el poco espacio que tenemos para movernos.
Para evitar que esto nos suceda en un viaje y se convierta en un problema de salud debemos seguir unos sencillos pasos:
Realizar círculos con el tobillo, manteniendo la punta del pie en el suelo mientras estés sentado. Cada media hora es un buen ejercicio durante un minuto al menos
Flexionar los pies, con el talón en el suelo y levantando la punta del pie, como complemento de los movimientos anteriores
Subir y bajar las rodillas de forma alterna, con la espalda apoyada en el respaldo. Este es otro ejercicio que debemos hacer y además así nos entretenemos algo más en un viaje de excesivo tiempo. Por ejemplo los que hacemos para cruzar el Atlántico.
Si es posible, realizar paseos cada una o dos horas. Por ejemplo ir al baño es un buen ejercicio simple, que permite que la circulación de la sangre se active un poco.
Para el viaje hay que llevar ropa y calzado cómodos, que no sean muy ajustados y que sean usados de otras veces.
Beber (mejor solo agua) con regularidad. Llevar preparado en el bolso unos caramelos por si notas una bajada de glucosa, y unos chicles si eres propenso a pequeños mareos.