Enfadados. Estamos muy enfadados y caminando hacia el odio. Vamos derribando lo anterior, lo que nos dejaron nuestros antecesores, algo lógico en todo proceso humano, pero no sabemos construir nada nuevo que sirva para recambiar, excepto la crítica vacía que no aporta ni cambios ni soluciones.
Nos van explicando los problemas, acompañados siempre de sus propias opiniones, pues les gusta darnos todo ya masticados.
No es informar, no es formar, es manipular pues se le añade a la información la propia opinión del medio.
Comunicar e informar no es principalmente transmitir tu opinión desde el poder que ofrece ser la voz de un medio de comunicación. Las noticias nos las venden, no nos las ofrecen para que sepamos qué está sucediendo.
Los adultos ya sabemos si nos dejan, formarnos nuestra propia opinión.
Los adultos ya sabemos si nos dejan, formarnos nuestra propia opinión.
Pero en los últimos años asistimos a que se nos informe con los datos ya dirigidos, mascullados, digeridos y acompañados de las propias salsas.
Eso es creer que la sociedad es incapaz de pensar por ella misma.