Felicitación a repartidores del Diario de Barcelona


Era habitual en los años de la postguerra (incluso años después) que a las familias pobres se les diera limosna añadida y a los trabajadores que servían a las entonces clases con algo más de economía, al menos en los periodos de las Navidades, se les diera un regalo económico, generalmente lo que hoy conoceríamos como propina. 

Como en esta postal se muestra el monte Gurugú deberíamos sospechar que esta postal es de principios del siglo XX. Antes pues de la pstguerra.

Era el caso de los repartidores de la subscripción del Diario de Barcelona como muestra esta postal, y también a los serenos, a los carteros o incluso guardias urbanos. No había repartidores de bombonas de butano, pues los pobres nos calentábamos con petróleo que comprábamos nosotros en garrafas o garrafones de cristal, y los ricos tenían calefacción central.