Volvemos al humor de los años 70, cuando a lo reaccionario, a lo carca, a las derechas retrógradas les llamábamos "inmovilismo" pues en realidad no querían que anda cambiara, quería que nada se moviera.
Y cuando surgían voces de que cambiar era excesivamente arriesgado, era inevitable que ante el cambio solo había dos opciones. O ir hacia Europa, o retroceder. Ramón lo explica muy bien en esta viñeta.